Algo Arrastrándose
“¡Dios mío!” gritó la peluquera. Había algo en el cuero cabelludo de Hannah. Cuando Hannah se enteró de lo que la peluquera había encontrado, se sintió muy avergonzada.
Y lo que es peor, su mortificante momento fue captado por la cámara de seguridad de la peluquería. Pero la peluquera no lo compartiría con nadie, esperó. ¿O sí?